Mi santo es mañana, el 11 de Agosto, en pleno verano.
Y aunque llevaba años pensando en regalarme una heladera,
este año he decidido cambiar de idea y pasarme a una batidora-amasadora.
Me encanta la repostería, pero me estoy haciendo mayor
o volviendo más vaga, vaya usted a saber,
pero cada vez me cuesta más ponerme a amasar
para hacer la base de las tartas, las galletas o los bizcochos.
Así que busqué un poco por la red y al final me he comprado
una de nivel intermedio, 350 W de potencia.
Ayer la recibí y para probarla, decidí hacer unas magdalenas o muffins
para que merendaran los niños y sus amigos y para traerme a la oficina..
Y navegando un poco por ahí, encontré a Alma Obregón
y su blog Objetivo: Cupcake perfecto.
Estudiosa en mil materias, vitalista, repostera,
mamá de un niño llamado Bruno...
vamos, que me sentí algo identificada con ella.
Así que me metí en su recetario, elegí los
¡¡¡Madre mía, qué ricooos!!!
La foto es muy mala, porque la he hecho con el móvil,
de prisa y corriendo... antes de terminarme el último!
Pero creo que se aprecia la esponjosidad...
Resumiendo: es muy cómodo utilizar la batidora
para mezclar los ingredientes y poder usar
la mantequilla sin derretir, le da una textura especial.
El sabor, si eres de los adictos al cacahuete, delicioso.
Yo no le puse trocitos de chocolate a la masa,
porque no me quedaban chips y trocearlo a mano,
en pleno verano...como que no.
Pero les puse algo de cobertura, para la mezcla de sabores.
En el link de los Muffins encontraréis la receta de Alma Obregón.
Y en el link de su blog...todo su recetario.
¡ Un placer hacer nuevos descubrimientos!